Fútbol
Unai y Oyarzabal, la jerarquía de los secundarios
Selección española | Nations League
Ante la final contra Portugal, De la Fuente defiende la calidad de los futbolistas menos llamativos
La prensa europea alucina con España y Lamine Yamal: «¿Quién se supone que va a detenerlos?
España es una maravilla

El fin de semana de junio en el que los alemanes suelen inaugurar sus vacaciones estivales amenaza con mal tiempo. El pronóstico prevé lluvias y temperaturas en descenso para el fin de semana y el lunes, una suerte de estampida germana con aeropuertos a tope ... y pocas opciones en los vuelos. La selección local quedó apeada y las ganas de fútbol se han aparcado. Ese frío ambiental contrasta con el calor y el entusiasmo que levanta la selección española, finalista frente a Portugal en Múnich, en un duelo el domingo en el que volverán a ser protagonistas dos jugadores a los que Luis de la Fuente no se cansa de elogiar, Unai Simón y Mikel Oyarzabal.
Durante la primera parte en Stuttgart ante Francia, el portero del Athletic y el delantero de la Real Sociedad impulsaron a la selección con una batería de aciertos hasta completar uno de los mejores partidos de sus vidas con la camiseta roja.
Al menos seis intervenciones de éxito para Unai frente al poderoso ataque francés y en especial una. Esa lectura de jugada al atajar un pase atrás de Mbappé que intentó asistir a Doué con el marcador empate a cero, antes de la avalancha de goles. También se frustró el candidato a Balón de Oro Dembelé, porque siempre encontró el guante del portero vasco para frenarlo.
Y lo mismo que Unai, Oyarzabal en construcción de juego de ataque, siempre certero en el fútbol entre líneas y en la asociación con el balón. En particular fueron decisivos dos toques de izquierda del guipuzcoano: el giro de tobillo dentro del área que dejó solo a Nico Williams y el pase elevado casi de espuela para permitir un mano a mano de Mikel Merino frente a Maignan y el segundo gol.
Son dos futbolistas sin peso mediático, con poco eco en los medios de comunicación cuando son convocados por el seleccionador. Una circunstancia que es muy habitual en la mayoría de los casos de los jugadores que no pertenecen al Real Madrid o al Barcelona, los equipos que más prensa arrastran en la selección española.
En el caso de Unai Simón, la noticia ha saltado por temas ajenos al campo de juego en varias ocasiones. La última fue un episodio en el que se negó a responder a un periodista de Madrid en una rueda de prensa en recuerdo de un encontronazo dialéctico del que ya nadie se acordaba nueve o diez meses después. Unai sí, él lo había anotado en su disco duro.
Por unas u otras razones, nunca ha sido un portero indiscutible entre la crítica pese a que es fijo para Luis de la Fuente en sus convocatorias. Lesionado hasta el pasado invierno en la muñeca por una dolencia que no le impidió disputar la Eurocopa como titular, fue el momento de David Raya, el portero del Arsenal. Raya impactó con su juego de pies y su elasticidad y personalidad. Debate lógico en un país en el que gustan estos temas, De la Fuente lo tuvo claro. Cuando Unai se recuperó, Raya regresó al banquillo.
Sin embargo, después del partido contra Francia el seleccionador fue más allá: «Unai ha sido un portero que nos ha dado garantías siempre, pero lo habéis maltratado (refiriéndose a la prensa en general, sin particularizar), siempre se ha dicho que tenían que venir otros, si debía jugar otro. Tiene una trayectoria espectacular, es un gran portero y un gran compañero. Suma siempre».
El propio guardameta, reunido ayer en Alemania con los enviados especiales, trató de minimizar el papel de víctima que le adjudicó De la Fuente: «Me halaga el elogio de mi entrenador, pero cada uno es consciente de lo que hace bien y de su momento. Hay que aprender a convivir con las críticas, no es que me haya sentido maltratado, sino que después del Mundial de Qatar viví una época difícil. Igual que no hay que tomar en cuenta las críticas negativas tampoco mucho las positivas. Solo me interesan las de mi entrenador, mis compañeros y mi madre».
Unai es un guardameta a la antigua usanza. Le gusta más el barro que el césped, entiende que un portero debe parar antes que jugar con el pie, y agradece a Luis Enrique que le enseñara la función del golpeo y el pase a sus defensas cuando nunca lo había practicado en el Athletic, donde manda otro tipo de escuela desde Iríbar hasta hoy. Así lo admitió en una entrevista a ABC.
Una versión similar, sin las fases polémicas que han calentado a Unai Simón, corresponde a Oyarzábal, jugador de gesto adusto pero muy fino e indiscutible con el balón en los pies. Autor del gol que entregó la Eurocopa frente a Inglaterra en la final de Berlín, no es sin embargo un futbolista mediático. Poco entregado a las entrevistas y a los medios, pasa algo inadvertido en esta faceta. En el campo es un pilar para Luis de la Fuente.
El goleador de esta selección
«Fue un partido inmenso de Oyarzabal -apunta el seleccionador-. Es un futbolista que interpreta muy bien el juego entre líneas y que cerca del área tiene un gran fútbol. Es el máximo goleador de España en mi etapa. Espero que se recupere bien porque lo necesitamos para la final». Si nada extraño ocurre, el delantero de la Real Sociedad será titular ante Portugal junto a Lamine y Nico Williams.
Zubimendi, su compañero en la Real Sociedad, tuvo palabras de admiración hacia el goleador de esta selección: «Como jugador inteligente aporta mucho. Sabe diferenciar todos los aspectos del juego. Sabe en lo que es bueno, lo explota al máximo. Y todo lo que tiene lo pone al servicio del equipo».
Sucedió un pasaje sintomático durante el choque ante los franceses. Extasiado el público español instalado en el fondo norte del estadio Mercedes Benz, con un 4-0 en el bolsillo antes del chaparrón goleador de los franceses, el personal pidió a Isco, andaluz, futbolista de toque y arte, más flamenco. De la Fuente no cedió a la petición popular de devolver al bético al equipo, sino que siguió confiando en su columna de fieles, con base original en la Real Sociedad. Zubimendi, Merino, Oyarzabal y en la defensa, Le Normand. Los que ganaron la Euro.
Con Huijsen, De la Fuente también reforzó el seguimiento que realiza su staff de analistas. «A vosotros (refiriéndose a la prensa) os ha sorprendido su rendimiento, pero a nosotros no porque ya lo conocíamos. Lo seguíamos desde hace tiempo, igual que hacemos con otros jugadores jóvenes, que también vendrán cuando toque».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete