Emiliano García-Page, presidente de Castilla - La Mancha, sobre el Rocío: «Es cautivador por todos lados, seas o no creyente»
El presidente manchego se declara un enamorado de la romería y su entorno, además rendirse a la belleza de las cofradías
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El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, pasó en cuestión de horas de acudir como un dirigente regional más a la Conferencia de Presidentes a la romería del Rocío, una tradición que siguen viviendo no sólo los propios andaluces, sino muchas personas más allá de las fronteras de la región que disfrutan tanto del ambiente como de la devoción rociera existente hacia la que es patrona de Almonte. No quiso perderse cita tan esplendorosa García-Page, a quien se le suele ver veraneando por otros puntos de Andalucía como la costa de Cádiz, y que ahora ha querido compartir buenos ratos con amigos en la aldea.
Los compañeros de Canal Sur Radio entrevistaron en la madrugada que va del domingo al Lunes de Pentecostés al presidente manchego, quien fue a subrayar la importancia y a comparar la belleza paisajística de Doñana con las Tablas de Daimiel de Ciudad Real: «Está precioso, la verdad. Es de estas cosas que te enganchan. Me enganché hace unos años a la Semana Santa de Sevilla, y voy todos los años desde hace mucho. De manera que ya me estoy enganchando aquí», se refería, acerca de otra de las grandes fiestas en este caso barriendo para la capital andaluza el toledano.
Habló a su vez el presidente autonómico de que había tenido la suerte de estar en la plaza de la Campana de Sevilla viendo cofradías hace un par de años: «He estado, pero fue cuando llovió tanto, no sé si el año que viene será fácil de ir. Pero ojalá, sería buen síntoma», aclaraba. ¿El Rocío? Me ha parecido una maravilla, espectacular, espectacular. Una maravilla. Sin duda no será el último. Si tengo salud, sin duda. Es una cosa verdaderamente emocionante», incidía.
Así, García-Page advertía entretanto que había cumplido a su forma uno de sus grandes deseos que era acudir al Rocío: «Es cumplir uno de los sueños de chaval, pues es una maravilla. Es cautivador por todos lados, seas o no creyente», puntualizaba. «Yo lo soy, pero aunque no lo sea. Que lo paséis muy bien», se despedía el máximo responsable manchego, que estuvo acompañado de Carmen Amores, directora de la televisión de Castilla-La Mancha Media.
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