Un informe toxicológico incorporado en el atestado determinará la viabilidad de la denuncia de Paloma Lago contra Alfonso Villares

La denuncia interpuesta por la presentadora Paloma Lago contra el exconselleiro do Mar de la Xunta de Galicia, Alfonso Villares, se encuentra envuelta en una bruma. Hasta la fecha, lo que se sabía era que la denunciante alegaba haber sido víctima de una presunta agresión sexual el 27 de diciembre del pasado año, de la que habría tomado conciencia al día siguiente, al levantarse desorientada y mareada, según ella misma relató en la denuncia. En ese estado la encontró su sobrino, que reside en un domicilio próximo en la parroquia ferrolana de Covas, quien decide entonces llamar al teléfono de emergencias 112, para que su tía reciba atención médica. Hasta el lugar se desplazó una ambulancia y una patrulla de la policía nacional. Cuatro días más tarde, como informó ayer este periódico, Paloma Lago se personó en la comisaría de la Policía Nacional de Ferrol para denunciar a Villares.

Fuentes policiales que tuvieron conocimiento del contenido de la denuncia reconocieron a este periódico que, en efecto, Lago sostuvo en su declaración haber sido víctima de sumisión química, aunque por el momento no se tiene constancia de que este hecho esté avalado por informe toxicológico alguno. Estas mismas fuentes sí han confirmado que en el atestado que han elaborado desde la Unidad de Atención a la Familia y a la Mujer (UFAM) de la comisaría de Ferrol existe un informe de estas características, que resultará determinante para darle viabilidad o no a la denuncia, pero del que no ha trascendido su contenido.

Distintos abogados consultados por ABC subrayan la importancia de que exista una prueba médica que recoja la existencia en sangre de sustancias compatibles con un supuesto de sumisión médica, que son eliminadas por el organismo en un lapso de 24-48 horas. De haberse realizado el examen forense con posterioridad, lo más probable es que no quedara rastro de ninguna sustancia. En ese caso, la causa quedaría convertida en una confrontación de testimonios entre denunciante y denunciado. Por el momento se desconoce cuándo tuvo lugar el informe incorporado a la causa.

Como ya avanzó este periódico, la presentadora y el político mantenían en el momento de los hechos una relación sentimental que se venía prolongando durante varios meses. De hecho, el jueves distintos programas de televisión emitieron imágenes de ambos coincidiendo en eventos en Ferrol durante los meses de junio, agosto y octubre.

Alfonso Villares presentó su dimisión como conselleiro del gobierno gallego el pasado miércoles 4 de junio, un día después de ser notificado por el Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSXG) de su condición de investigado por un presunto delito de agresión sexual. Al renunciar a su cargo, Villares perdía el aforamiento propio de los miembros del Ejecutivo autonómico, lo que lleva al TSXG a devolver la causa a los juzgados de Ferrol.